sábado, 31 de diciembre de 2016

Llorar

No me gusta llorar, me lo prohibieron desde chiquitita en nombre del amor.

Cuando lo hago, me siento ridícula y dramática, dos estados que no me causan buena sensación.

Por eso he convertido mis lágrimas en palabras, en ironía, en rebeldía, en ira, incluso soy capaz de llorar riéndome.

Por eso yo sola, sola en mi caballo, sola en mi castillo, sola en mis páramos, sin testigos de esa parte tan íntima y escondida.

Por eso yo elocuente, irónica, rebelde, cabezota, orgullosa, payasa.

Hace poco lloré, con lágrimas, como lo hace la gente normal. 

No tenía un motivo concreto, pero me arañaban todos los que caben en 40años y no había sido capaz de bendecir con mi agua salada.

Me dejé caer en los brazos de mi hermana y lloré.

Más tarde me caí en los brazos de mi amiga-hada madrina y volví a llorar.

Era un llanto distinto, calmado, sentido, reparador, amoroso, cálido.

Me gustó mucho mi llanto.

Pude sentir que no era mala por llorar, que no manipulaba a nadie si lo hacía, que merecía el abrazo de alguien mientras lo hacía.

Ya no tenía que esconderme, no de los demás, de mí misma.

Hice las paces con mi niña asustada, la que no se atrevía a llorar para que no la castigaran o dejaran de mirar.

Mientras alguien me abrazaba y me sostenía, yo pude abrazarla y sostenerla a ella.

Fue tan hermoso, tan liberador, tan purificador, tan... ¿purgante? Jajaaja.

Pues sí, fue justo eso, purgante. Eliminé todo lo que ya no necesitaba, todo lo que me había servido hasta ahora pero ya no.

Le dije: "Gracias, has formado parte de mí hasta ahora para crecer. Desde ya, puedo hacerlo sin ti, te libero del peso de salvarme, me libero del peso de creer que te necesito"

Creo que todo ocurre en el momento preciso, si no, no ocurriría.

Mi niña y yo tenemos una mochila casi vacía, lista para llenarla de nuevos proyectos, gente, amor, risas y lágrimas también, ya no nos asustan.

Por favor, nunca le digan a un niño o a una niña "no llores".





domingo, 4 de diciembre de 2016

La vida es dura

"La vida es dura", "no es tan fácil", "eso es imposible"...

¿Quién dijo esto? ¿Para qué lo dijo? ¿Por qué le creímos?

Creo que es la excusa perfecta, " es imposible, mejor me quedo tranquilita y ni lo intento"

Tenemos una gran capacidad para justificar nuestros miedos.

El miedo, tiene muy mala prensa, muchos lo hemos entendido mal todo este tiempo.

El miedo es tu amigo, te dice, "ey, ey, por aquí, detrás de mí están tus deseos"

Creo que las cosas se complican cuando dejamos de ir a nuestro favor.

El emperador observa su reino tranquilamente, sereno, se ocupa de él, pone sus leyes y deja a los otros en paz.

Sabe que si él está bien, todo a su alrededor también.

Cumple las tres "p" de las que habla el mago David Testal:

"Pase lo que pase", asume las consecuencias de sus decisiones con total responsabilidad, sin buscar cumpables o inocentes.

"Pese a quien le pese", no se limita por lo que los demás puedan sentir, entiende que la reacción de cada no es asunto suyo, tiene su conciencia tranquila porque actúa desde su corazón.

"Piensen lo que piensen", no se preocupa por el juicio ajeno, sabe que él no tiene que demostrar o convencer a nadie de sus ideas.

No toma decisiones para ser aceptado o amado, con la experiencia ha comprobado que cada uno interpreta el mundo según su mirada, por lo que no depende él.

No es héroe ni villano, no pretende salvar a nadie ni ser idolatrado.

Se ahorra discursos, sabe que "obras son amores y no buenas razones". Su ejemplo es más poderoso que diez mil mítines. 

¿Y si cada uno de nosotros decidiéramos ser el emperador o emperatriz de nuestro reino? 

¿Y si nos ocupáramos de él llenos de amor y gratitud, dejando a los otros en paz?

Creo que éste sería un mundo más maravilloso aún...



lunes, 14 de noviembre de 2016

Mi mamá me mima

Qué maravillosa, divertida, asfixiante, excitante, liberadora, claustrofóbica, certera, bipolar, fantástica... es a veces la maternidad.

Siempre fui muy madrera, pero con 12 años comencé a cuestionarme  los cuentos que me decía mi mamá.

Aún así siempre me vi entre sus alas, hasta que con ocho meses de llevar a Salma en mi útero, tuve un episodio de vértigo existencial.

Sentí que pasaba de ser "la niña" a ser "la madre", ni siquiera me detuve en el escalón de ser "la mujer".

La casa que conocía de mi cuerpo se desmoronó, ahora nacería un ser que dependería totalmente de mí, reclamando mi presencia las 24 horas del día por pleno derecho.

Ya no podía salir corriendo a los brazos de mamá. Ahora, yo era esos brazos que daban sin esperar recibir algo a cambio.

Yo la radical, la independiente, la reina de mis páramos, cedía mi trono a esa hermosa y tan deseada criatura, Salma.

Qué valiente Salma, decidió llegar la primera aún sabiendo que se chuparía todos mis miedos a través de mi leche templada, pero cortada por el cuerpo trémulo de la niña que empezaba a crecer como madre.

Miedo a la muerte, a la vida, al abandono, a la enfermedad, a no ser capaz, a ser como mi madre, a la pérdida, a la guerra, a los tsunamis....

Entonces llegó Maya, para terminar de derretir la casa de la niña y que renaciera así los cimientos de la casa de la buena madre. 

Qué lista Maya, llegar después y poder nacer en casa, comer chocolate antes de los dos, no mamarse todas las vacunas porque sí, tragar arena sin gritos de histeria...

Y todavía hay gente que se pregunta cómo hijos de los mismos padres pueden ser tan diferentes. Muy fácil, porque los padres no son los mismos cuando nace el primero que cuando nace el segundo, el tercero, el cuarto...

Todos son amados por igual, pero temidos de diferente manera...


domingo, 30 de octubre de 2016

Ojalá!!!

Querida amiga, ojalá pudiera transmitirte mi esperanza cierta, la fe en que sea real o no, ya es.

No necesitas a alguien para sentir que la vida tiene sentido.

Es maravilloso cuando sucede y también cuando no, cuando no tienes excusas para evitar bucear en ti.

Ojalá que cuando aparezca esa persona que tanto deseas te encuentre entera, desequilibrada de amor, pero completa.

No estás sola, nunca lo has estado y nunca lo estarás.

Sabes que te entiendo, el mismo dolor y la misma incertidumbre rasgaban mis entreñas cuando despertaba en mi cama vacía de testosterona, cuando llegaba a casa y un cuerpo masculino que me abrazara no encontraba.

Parece algo frívolo, algo egoísta, una nimiedad comparado con la nueva legislatura de Rajoy, pero las comparaciones siempre fueron, son y serán una mierda.

Sé de tus ganas de compartirte con alguien tan especial como tú, y tienes derecho a desesperarte, a gritar como las locas, a agarrarte a cualquier poya ardiente que te de algo de calor.

Y nada de eso te compensará.

Te aliviará, pero no recompondrá tu corazón, el corazón de la niña que te habita y se desgañita para que dejes de arroparla con sucedáneos de amor.

Lo único que ella te pide es que la mires, que la valores, que le digas que lo hizo bien, que se equivocaron con ella, que ahora lo ves y le das su espacio.

La abrazarás como nunca antes lo hicieron, le dirás que no hay nada de qué salvarse, por tanto no hay nada que temer.

La realidad siempre es benévola cuando te ocupas de ti y dejas a los otros en paz. Cuando tú estás bien, lo que te rodea está genial!!! Si tú cambias el mundo cambia.

Te quiero amiga



domingo, 25 de septiembre de 2016

Desnudos

¡Qué bello es un hombre desnudo! Siempre está vestido de "verdad", aunque crea que te está mintiendo. 

La desnudez siempre es verdad, sólo un vanidoso o vanidosa se dejaría engañar.

No me importa que me mientas sabiendo que lo haces, yo siempre elijo si te creo o no. Así alguno de los dos termina siendo honesto.

Es peor lo otro, mentir estando totalmente convencido de que se dice la verdad. Así ésta pocas veces encuentra espacio.

Manipulamos tantas veces en nombre del "amor" que ya no sabemos cuándo es cierto.

Nos perdemos en océanos fingidos sin saberlo, es por eso que aunque no sea real, terminamos ahogados en él.

"Lo que está muerto no puede morir", pero puede resucitar.
 



domingo, 18 de septiembre de 2016

¿Esperas algo de mí?

-¿De verdad no esperas algo de mí?
-¡Claro! Espero disfrutar de momentos tan ricos como éste cada vez que lo queramos tú y yo.
-¿Desearías compartir momentos ricos con alguien más?
-No lo sé. Sólo sé que lo que está ocurriendo ahora me encanta.

¿Cuántas veces nos perdemos lo cierto en pos de la pedrada?
¿Cuántas veces dejamos de disfrutar lo que tenemos en frente pensando en posibles películas de terror?

Estamos sufriendo en el paraíso.

¿De verdad quieres que te diga que serás el hombre de mi vida? ¿Me creerías?
Puede ser que sí y puede ser que no.
¿Cómo puedes saber que quedarte conmigo sería lo mejor para ti?

Entonces, olvidemos las promesas, no valen nada porque la vida es cambio constante. Tú y yo somos distintos a cada rato. 

Démonos la libertad de cambiar de opinión, de contradecirnos, de ser honestos con nosotros mismos.

Reconozco tu libertad y me rechifla que la quieras compartir conmigo en momentos elegidos con ganas sinceras.

Dime y haz lo que quieras cuando quieras, yo decidiré si te acompaño o no desde la misma libertad.

Cuántas maravillas nos perdemos estancados en lo que podría ser. Cuántos besos, caricias, ruidos de amor tirados por el water de "pensará que soy...me dirá que no..."

Yo lo quiero todo, no me voy a quedar con las ganas de intentarlo.



sábado, 10 de septiembre de 2016

Choques y despeñamientos

Imagínate que te vas a lanzar desde lo alto de una montaña, ¿qué eliges, lanzarte de frente o dejarte caer de espalda?

¿Por qué hay que elegir, quién lo dijo?

Cuando decido despeñarme sobre tu montaña, a veces lo hago de frente, para ver lo que ves tú a través de mis ojos. Otras prefiero darte la espalda para imaginar lo que tú ves y yo no puedo.

¿De verdad crees que eres tú el que eliges, crees que soy yo?

Tantas discusiones todavía pensando que somos nosotros los que decidimos y es algo mayor lo que lo hace. Siempre se trata de algo mayor.

Algo que está deseando experimentarse a través de los desprendimientos al vacío, de los choques.

Choques de miradas, choques de cuerpos, choque de las manos contra la carne intentando traducir el deseo.

Desprendimientos al vacío de lo que deja de ser siendo. 

Nada existe y sin embargo todo está permitido.

Lo permito porque lo deseo, por eso lo tengo.

Cuidado con lo que deseas, produces más magia de la que crees, ¿serás capaz de sostener tus caprichos?

Yo sé que sí, de no ser así, no se te concederían.

Capricho, ¿quién inventó esta palabra?
Algún celoso del deseo ajeno cumplido, alguien que osó juzgar su necesidad.

El capricho es bueno, es un deseo, el deseo es lo que precede al sueño, el sueño la antesala de la realidad.

Realidad, sueño, deseo, capricho, ¿crees que hay alguna diferencia?






Fácil

Todo es fácil cuando me elijo yo.

Cuando soy honesta conmigo.

Cuando cierro los ojos y no me da miedo contestarme.

¿Me gusta la música que haces con tus ojos cuando me miras?

La música mueve el mundo, es la manera que tienes de danzar la vida.

¿Me preocupa realmente que entiendas mi forma de bailar?

Pocas cosas me preocupan ya.

Cuando dejas de ocuparte de lo que no te corresponde, la música es más armónica.

No necesito explicaciones  ni promesas, puedo oír tu melodía, eso es todo lo que preciso escuchar.

No hay mentiras, sólo acordes malentendidos.

Por eso me elijo yo, dentro o fuera de ti, así es más fácil comprender la música del mundo.


martes, 6 de septiembre de 2016

Regalos por todos lados

Mire donde mire sólo puedo ver regalos.

Unas niñas que crecen sanas, felices, volando con su papoto que las adora y cuida a un país donde les espera gente sonriente, deseosa de enseñarles un mundo distinto.

Un bebé recién dado a la luz sorprendiendo con su vitalidad esperada antes de tiempo, mostrando la fuerza que su nombre guarda.

Unos papás que se dejan acariciar, amigos a los que cuidar agotados por tanta felicidad. 

El carro de la compra lleno de alimentos con los que cocinar para el amor que nos damos, al servicio de mi cuerpo y de los cuerpos de los que amo.

Un día que amanece nublado invitándome a abrazarme y que poco a poco se va despejando para invitarme a ser abrazada por el sol, aumentando mis ganas de desnudarme dentro del mar.

El mar, ese amante inabarcable, inagotable, sereno y con sus propias leyes, indómito. Recordándome así mi propia naturaleza reflejada en sus ojos claros de sal.

El amor no se pide, se da, y todo buen amante conoce y acata esta norma. Así me entrego y me doy yo al mar, que es la vida, que es el flujo donde vienen y van los sueños. Donde se nace y se muere y se vuelve a nacer cada vez que nos sumergimos en él.

Mi cuerpo cíclico, sangrante, capaz de morir lo viejo y que así entre lo nuevo. Bendigo mi cuerpo de mujer, su capacidad de vacío para crear vida.

Mi amiga valiente que se va a trabajar a otra ciudad entregada al porvenir, llena de regalos por materializar, me espera con los brazos abiertos para cuando decida saltar.

Hermanos que me acarician aún cuando no están cerca.

Unos padres que me siguen meciendo aún cuando creo que no lo necesito.

Qué necia e ingrata sería si me inhabilitara para sentir toda esta belleza creada de dentro afuera y de afuera adentro. Una Kundalini perfectamente alborotada en su equilibrio.




martes, 23 de agosto de 2016

Quien esté libre de esperma, que tire la primera piedra

Todo el alboroto que ha surgido en estas olimpiadas de Río sobre el machismo, me ha hecho reflexionar más aún sobre un par de cosas que ya venían rondando por mi cabeza.

Machismo, feminismo, patriarcado...

Toda esta lucha absurda entre hombres y mujeres. Los insultos y faltas de respeto entre ambos.

Me hace mucha gracia cómo algunas mujeres exigen respeto llamando a un hombre "machirulo", ¿de dónde coño salió este término tan pueril?? Parecen regañinas de patio de colegio...

"Eres una machona", "eres un machirulo", naninananana...

Jajajajajajajajajajajajaaja, qué absurdos somos a veces cuando queremos defendernos basándonos en la rabia aprendida, ¿realmente es nuestro enfado? ¿De verdad todos los hombres con los que nos topamos son tan malos?

Algunas de estas mujeres que tanto despotrican de los hombres, son adictas a los selfies mostrando cuerpazo o pelazo para atraer al macho alfa, critican a "la otra" que le come ahora la poya a su ex, o se comparan con chicas más jóvenes o despampanantes que ellas.

¿De qué estamos hablando pues??

¿Por qué no le hacemos un gran favor a  nuestras ancestras que se dejaron el culo para que hoy gocemos de derechos  fundamentales y seguimos siendo ejemplo de reivindicación respetuosa y equilibrada?

¿Qué favor le hace la mujer a la mujer cuando miente para aprovecharse de la ley y hacer daño al hombre por despecho? El mismo que le hace el hombre al hombre cuando golpea a una mujer porque es "suya"

¿Qué favor le hace la mujer a la mujer cuando se victimiza para quedarse con los niños y la casa? El mismo que le hace el hombre al hombre cuando se victimiza para racanear en la pensión de sus hijos o no pasarles la manutención.

De la misma manera que debemos apelar a los jueces, abogados, servicios sociales, etc, por una visión individualizada, profesional y humana de cada caso, debemos pedir a hombres y mujeres responsabilidad y trabajo individual.

Cada vez me sobra más el género. Ya no se trata de hombre o mujer, se trata de ser humano comprometido consigo mismo y los demás.

Me sobra la competencia, el insulto, la vejación, el imperialismo, mi verdad contra la tuya, la hipocresía, todo esto es patriarcado. Si queremos acabar con él ¿por qué lo seguimos perpetuando al defendernos con sus mismas armas?

¿Por qué no se respeta la tendencia natural individual?

Por ejemplo, ¿por qué se tacha a las madres que naturalmente deciden criar a sus cachorritos con teta y apego de "traicionar" a las mujeres que lucharon por la igualdad laboral?

Creo que tanta lucha y resentimiento nos está confundiendo.

Creo que una mente enfadada y resentida no puede provocar un cambio, ya sea de mujer o de hombre.  

Sé lo que se siente al ser vejada y maltratada y por esa experiencia sé también que ser igual de agresiva con el hombre, no le hace ser más comprensivo, todo lo contrario, le hace más agresivo aún si cabe. 

¿Por qué no cambiamos la perspectiva? ¿Por qué no vamos a la raíz del problema y vemos qué carencias hacen a un hombre ser maltratador y a una mujer aguantar ese maltrato? Evidentemente teniendo en cuenta la urgencia de cada caso.

Como dice el Principito, "es una locura pensar que todas las rosas son iguales sólo porque una te picó"

Si hubiese dejado de acariciar las rosas porque una me picó, no habría conocido al padre de mis hijas y no las tendría ahora entre mis brazos.

Tengo amigos preciosos y respetuosos, igual que tengo amigas bellas y comprensivas.

Hagámonos el humor, no lo tomemos personal para no lanzar la primera piedra que caiga en nuestras manos.

Si no fuera por la madre que nos parió, hoy no estaríamos aquí, pero sin el esperma de nuestro padre que la fecundó, tampoco.


miércoles, 17 de agosto de 2016

Aprender

"Uno debe ser muy cariñoso consigo mismo cuando está aprendiendo algo nuevo"
-Come, reza, ama-

¿Eres capaz de amar a todo el mundo?

"¿Qué amamos en los que amamos?"
-Iván y Elena-

Pues sí, me he dado cuenta de lo poca cariñosa que he sido conmigo, hasta hace bien poco, mientras aprendía a estar sin un compañero.

No se me ocurrió mejor idea que añadirle al miedo de la maternidad, el miedo a la soledad, suponiendo que ésta última exista, cada vez estoy más convencida de que no.

Jajajajajajajajajajajajaaja!!! Qué gracioso es todo cuando lo cuestionas.

Mucho tiempo huyendo de mi deseo de estar conmigo, llevándome la contraria todo el rato, esforzándome en hacer que me eligieran cuando ni yo misma deseaba elegirlos.

Qué curioso cómo alguien pueda ver bellos  unos ojos ciegos.

¿Qué amamos en lo que amamos? Qué pregunta tan bonita.

Cuando amo, estoy en sintonía con mi belleza, que es la belleza que entonces puedo percibir a mi alrededor.

Esa belleza ya no excluye. 

Amo el mar en calma y enfurecido, porque así soy yo.

Amo el sol radiante y el sol asfixiante, porque así soy yo.

Amo la claridad y la confusión, porque así soy yo.

Qué fortuna la gente que me rodea, el mar, la música, bailar, comer, las risas, las sonrisas tímidas, el llanto, la emoción, el susto, el asombro, el orgasmo, el gozo de vivir.

Controlar, controlar, negar la fuerza de la vida, a donde me lleva...

¿Por qué me asusta tanto perder el control?

Nunca me daría menos de lo que realmente merezco, ¿lo hago?, ¿de qué me siento merecedora?

"Vuelve a creer en el amor, Lola" -Gracias, gracias, gracias!

Qué delicioso encontrar gente que te dice en voz alta lo que tú no te atreves.

Aprendiendo... 
Recordando ser cariñosa conmigo mientras lo hago.

Escalar montañas, sumergirme en océanos, empaparme de todo y regarlo todo.








lunes, 15 de agosto de 2016

Preñarme de sueños

Como dice mi amigo Iván, "preñarse de sueños y hacerlos realidad" ¿Quién me lo impide?

¿Quiero encontrar algo?
¿Hay algo que encontrar?
¿Tengo que hacer algo o todo viene a mí?
¿Y si todo viene de mí?
Todo lo que deseo, todo lo que ya tengo.
Lo tengo todo y todo es nada.

Nada es un perfume, es un silbido, nada es el sonido y es el silencio.

Si lo contengo todo, ¿de qué me quejo?
Rechazar la realidad es negarme a mí misma.

La tinta fluye, todo fluye, estoy viva, porque ya morí, y moriré y viviré, así siempre, todo el rato, decidiendo.

No decidiendo, permitiendo ser lo que ya es, no me resisto.
La violencia engendra violencia.

No tengo que enfadarme y puedo enfadarme también. Me lo permito todo, lo expando.

Todo soy yo, todo está bien porque yo estoy bien. 

Si no te gustan las mentiras, deja de mentirte todo el tiempo.
El observador se convierte en lo observado.

Yo enamorada, yo enamorsemilla, yo enamorflor, yo enamorfruto, yo enamormuerte. Para ser y que otros sean. El flujo de la vida es éste.

Anoche me comí un pollo delicioso y ya lo cagué esta mañana. No me quedo llorando pensando que no me volveré a comer un pollo tan rico, si me apetece me lo vuelvo a hacer o me compro otro.
¿Por qué no hacemos así con todo?

"Joder, con lo bien que folla, qué pena que fuera de la cama no seamos tan afines"
"Joder, conectamos muy bien en cuanto a principios y gustos, qué pena que en la cama no me levante pal aire"

No te compadezcas de ti misma, cocina el pollo como a ti te gusta. Empieza por ti.

La mayoría de las veces, cuando nos enamoramos de alguien, es de su potencial, no de la persona en sí. Por eso queremos cambiarla sutil o descaradamente. Nos enamoramos de la persona que imaginamos o queremos que sea, y esa no es la que está a nuestro lado.

Cuando eres honesta contigo, cuando te cuestionas todo lo que te paraliza y eres capaz de crear tu realidad, dejarás de desear lo que no es.

Dejarán de atraerte las personas que no te atraen. Amarás lo que es y serás amado como eres.

Estoy en todos los mundos y puedo elegir lo que deseo de cada uno de ellos ¿cómo he podido vivir ajena a esta verdad?





domingo, 14 de agosto de 2016

Respuestas preguntadas

¿Por qué nos conformamos con imaginar la belleza? ¿Por qué no la hacemos realidad?
¿Por qué ponemos el poder fuera, en otros? Mi pareja, mi madre, la política, la enfermedad, la desgracia, el clima...
¿Quién me dijo que los sueños no se cumplen?
Miro hacia atrás y veo todos los sueños cumplidos, miro hacia delante y veo todos mis posibles potenciales.
Si lo cree una vez, ¿por qué creo que no podré ahora?
Si otro lo hace, yo también puedo, somos uno, su fuerza es la mía, es la de todos, es la que mueve el mundo, los universos.
Cuando siento miedo, ¿es mi miedo?
¿Qué mandato estoy obedeciendo?
Si me duele aquí, ¿por qué no me muevo?
Si sé que algo no me sirve, ¿por qué me quedo? ¿Por qué me aferro, lo defiendo, lo justifico?
¿Por qué tengo prisa? ¿A dónde quiero ir?
¿Por qué no creo ese lugar, esa persona, esa belleza?
Cuando pido un deseo ¿sé lo que realmente deseo? Y si así fuera, ¿por qué no lo hago realidad? ¿Por qué no me comprometo con él?
Me doy cuenta de que las preguntas se responden con más preguntas y que cuando voy atrás en la lista de preguntas, las primeras ya no tienen sentido.
Todo se responde sólo.
Veo que lo que me separa de la realidad, es sólo mi pensamiento.
Veo que todo está bien.
Me siento confiada, en paz.
Me entrego a la verdad original.
Que se haga tu voluntad, que es la mía.
Me abandono al misterio y creo un espacio para que el deseo se cumpla.
El vacío donde todo es posible.


sábado, 30 de julio de 2016

Si no te duele, no me quieres

¿Cómo se le puede desear dolor a quien amas?? 

"Si no sientes celos, no te importo"
¿Qué clase de loco o loca hizo tremenda afirmación?

Si yo te amo, quiero verte feliz, luego ¿cómo puedo sentir celos al verte sonreír con más gente aparte de mí o compartir charlas interesantes con gente sorprendente?

Amor es libertad. 

El amor nunca es una amenaza.
No puedo sentir miedo de perder algo que no es mío.

"Sufro porque mi compañero me engañó" ¿Es esto realmente cierto?-como diría la gran Byron Katie-
Vamos a invertirlo... "Sufro porque me miento para convencerme a mí misma de que elegí correctamente, aunque sepa que en el fondo esa persona no me quiere y yo a él tampoco"

Es más fácil ocuparse de los demás que de uno mismo. Si te ocupas de ti y dejas a los demás en paz, ¿a quién reclamarás tu atención prestada?

"Menuda lagarta que se atreve a enamorarse de mi marido", ¿es esto realmente cierto?
Qué tal sería decir..."menuda lagarta yo que juzgo a la persona que ahora mismo hace feliz a mi marido mientras yo me conformo con la comodidad que me provoca su sóla presencia, aunque ya no haga nada por alimentar este amor o incluso lo deteste"

Si estoy conmigo, si me alimento y estoy encantada de conocerme cada día más, no siento la amenaza de ser abandonada. Ya no quiero poseer y manipular para que se queden a mi lado.

Comprendo que esa no es la relación que quiero conmigo misma. Por lo tanto no necesitaría reflejarla en alguien más.

"Nunca fue mi rival porque fue la elegida" Ante esto, no hay nada que hacer.

Por muy grande que sea el berrinche, la realidad no va a cambiar.
 
La teoría es muy bonita, lo sé, y la práctica lo es aún más.

Sobre todo cuando me cuestiono constantemente mis pensamientos estresantes.

¿Es realmente cierto esto que siento? ¿Qué tal si lo invierto?

La palabra es el arma más poderosa del ser humano, entonces, pudiendo elegir entre las palabras que me hunden o las que me elevan, ¿por qué habría de elegir las que me limitan??

No tengo ni la mitad de las respuestas, pero sí miles de preguntas que me hacen tener más conciencia de mí misma y por tanto del mundo que me rodea, puesto que todo es mi reflejo.

Escribo en voz alta aquello que me hace sentir bien y aquello que me hace cuestionar el rol aprendido que ya no me sirve.

Pareciera que el amor va siempre ligado al sufrimiento, cuando es todo lo contrario.

Atrapada entre el cuento de "necesitas a un hombre a tu lado para ser feliz" y el de "mejor sola que mal acompañada", me estoy perdiendo el de "juega y entrega todo lo que eres". El amor se da, no se pide.

"Amar lo que es", dice Byron Katie. La realidad es siempre benévola cuando dejas de pelearte con ella.







domingo, 17 de julio de 2016

El abandono

No te abandona nadie, te abandonas tú, ofreces desde la carencia, no desde la inmensidad que eres. 
Entonces reclamas, te sientes "malquerido", eliges personas que te lo demuestran, sigues siendo la víctima, sigues responsabilizando al otro, se cansan de sostenerte, te dejan y así sigues perpetuando el ciclo de la no vida.
"Al que muestra el hambre no se le da de comer"
Deja de mentir, no eres una mitad, la gente ya no se cree el cuento de "la media naranja".
Eres completo, deja de mutilarte para que te quieran. 
Tu miedo a perder es mayor que tu amor por la vida.
Hasta que no aceptes que lo único que permanece es el cambio, que tú mismo eres ese cambio, seguirás sintiendo el vacío que te asusta.
El vacío se habita, no se visita de vez en cuando.
Quédate ahí, hay monstruos maravillosos, serpientes con cabeza de ángeles, sirenas que abren la caja de Pandora.
Todos te aman, porque todos son tú.
Y tú sigues huyendo sin entender que no puedes escapar de ti mismo.
Cuando sepas que el vacío es el lugar, no seguirás escondiéndote.
Entonces sabrás que el mundo es la ilusión, y como tal, tú eres el que lo crea al soñarlo.
Si has de abandonarte que sea en tus brazos, que sea en tu vacío.
Te deseo sueños bonitos y tiempo para vivirlos.



Absurdo olvidarte

Absurdo olvidarte.
Absurdo negar la parte de mí que te echa de menos.
Tú y todos me regalan recuerdos a cada instante.
Son mi verdugo, mis víctimas, mis salvadores, mis maestros, en fin, mi espejo.
Gracias por darme el cincel para moldear mi vida, el pincel para pintar mi cuerpo, el mechero para incendiar mi paja.
No puedo olvidar a quien amé, no reniego de ningún hombre en mi vida.
Todos han sido buenos conmigo.
Todos me han acariciado, besado, alimentado. A la niña, a la mujer, a la madre.
Negarlos sería jugar en mi contra, boicotearme, dejar en ridículo a la que entonces eligió a cada uno.
Así fue porque valió la alegría y la pena. 
Gracias, gracias, gracias.


lunes, 13 de junio de 2016

Yo no puedo ser tu media naranja

No puedo ser tu mitad, no me compongo de una sóla parte, tengo miles, es más, soy un número impar.

Por eso nunca estaré a tu nivel, siempre verás  algo que me sobra o me falta.

Soy impar porque estoy enfadada, por eso elijo a los que se van, los que no se entregan, como yo.

Pensé que era diferente, que había aprendido las lecciones del pasado. Que había aceptado, soltado, integrado. 

Me doy cuenta que no, me lo dice mi útero cada vez que sangro y no lo quiero oír.

Sólo había bajado el telón, dejando a los actores secundarios en pause. Por eso vuelven repetidos en otros cuerpos.

No puedes empezar lo nuevo sin terminar lo viejo, no puedes llenar el cuenco que ya está reventado.

¿Cómo pueden ser dos corazones uno si están separados por una mitad?

Mis partes tienen múltiples combinaciones que cambian de color con la luna y de forma con el barro del fango que nace de mis aguas estancadas.  

Nunca quise removerlas, estaba cómoda en esa aparente transparencia, hasta que mi cuerpo me gritó que parara, que mirara en el espejo sin el photoshop de la cara dulce y la que siempre ríe.

No quiero sentirme entera, por eso no lloro. No soy completa, eso se nota, por eso me siguen pidiendo mitades.

Sentirse completa duele, ya no hay culpables, no hay víctimas, sólo hay un cuerpo que grita mi nombre invocándome. 

Invoca también a la que odia, a la que reclama, a la que envidia, a la que no tiene razón, a la que juzga, a la perezosa, a la cobarde.

No hay dolor más grande que aquel que nos infringimos a nosotros mismos cuando nos mutilamos por ser socialmente aceptados, por pertenecer a la manada. El dolor que nace de la falta de autocompasión. 

Entonces lloro y lloro, mi útero sangra y mis manos me abrazan, moldeando el barro que dará nueva forma a la que renace.

Y me toca dejar de ser la media madre, la media hija, la media amiga, la media amante, la media enfermera, la media Lola.

Duele, duele mucho, tanto que hasta mis encías también sangran por la rabia contenida. Tanto, que ya no sufro. Tanto, que me libera.

Es del barro que nace la flor de loto, es de la sangre que nace la vida.

A lo mejor el Amor se puede vivir más de una vez, a lo mejor sólo es cuestión de ser valiente y entregarse a la vida completa, en paz conmigo y entonces con el mundo. 

Aunque siga siendo impar, por elección esta vez.


domingo, 5 de junio de 2016

Deja de disculparte

Deja ya de disculparte por penetrarme y que me duela.

Tú no me dueles, le dueles a esos que te hacen pensar que no eres suficiente.

Ese no es tu dolor, no lo creas tú, son sus expectativas, sus pedradas.

Deja de estar en guerra con todo y todos por ellos, tú no eres conflictivo, sólo te identificas con el reflejo que ellos quieren ver.

Invéntate otro cuento, el cuento donde eres el ángel que sabes, el cuento en el que te encuentras con la que quieres dormir, la que será madre de tus hijos.

Yo no creo que sólo tenga que dormir con "el que es", todos "son".

A veces pesados, a veces encantadores, a veces amigos y siempre maestros.

No me peleo con "lo que no es". No discrimino a los que elijo en pos de "el que es", menuda falta de respeto a la vida que dibujo sería.

Entonces mi cuento, por ahora, tampoco puede ser el tuyo y está bien.

Te quiero mucho, siempre que me acuerdo de ti mi boca se curva de felicidad, recuerda al ángel tan lindo que eres mezclado con el lobo feroz que también te habita. No recuerda al que se cree la historia del que hace daño.

Supongo que será porque me identifico contigo, porque me veo en ti, porque cada vez más, me amo alegre.

La vida es bella, ¿cómo puede ser fea la vida de quien puede besar?




lunes, 23 de mayo de 2016

Amigas revolucionarias

Me encantan mis amigas, porque son revolucionarias.

No van con capuchas ni levantando el dedo anular, que también está bien de vez en cuando. Ellas desafían las reglas de la "pena negra" que esta sociedad patriarcal pretende resaltar con su cultura del miedo y del consumismo.

Ellas lloran sin taparse la cara, se pudren asustadas sin saber lo que ocurre exactamente para luego florecer llenas de mordidas de placer.

Ellas son felices y lo muestran sin vergüenza. Se niegan a jugar el papel de víctima exigida por mediocres que te miran mal si tu sonrisa mide más de 15cm.

Ellas me liberan de la responsabilidad de vivir mil experiencias para ver qué se siente, soy capaz de somatizar las cosquillas, las lágrimas, los tirones de pelo y los chupetones a través de sus cuerpos sudorosos, temblorosos.

Las adoro, las amo, y lo saben porque yo también soy revolucionaria. No temo decirles si me la comen, me aburre o me apasionan sus historias.

El respeto por las etapas y espacios de cada una es primordial, así como la honestidad.

Afortunadas de la vida que además de vivir el regalo, lo compartimos.


sábado, 21 de mayo de 2016

Ven de noche

Cuando decidas llegar a mi vida, hazlo de noche.

Que la parte iluminada por la luz de la luna sea tan grande como la sombra que se proyecta tras de mí.

Así no habrá confusión, no habrá excusa,  podrás decidir si me tomas completa.

Podré ver si te asustas, si te escondes, si me abrazas o me esquivas.

Camina de puntillas con tus dedos sobre mi cuerpo.

Adivina los lunares que soñastes encontrar en mi piel.

Ven descalzo, para que puedas resbalar dentro de mí, para que pueda ver que no te da miedo caer.

Ven sin guantes, para que puedas enterrar tus manos en mi cuerpo, para que pueda ver que no ta miedo amasar sueños.

Ven sin coraza, para que puedas fundir tu corazón con el mío, para que pueda ver que no te da miedo latir en uno

Llega sin vergüenza, sin permiso, sin pudor. 

Ven, y si tienes miedo, ven con miedo, se irá sólo, porque sobra, no hará falta echarlo.

No voy a preguntar cuándo vendrás porque sé que lo harás.

Estoy preparando mi nido, mi casa, quitando enredos, esquinas, polvo.

Removiendo las aguas estancadas, jugando a las cartas con mis demonios y mis ángeles, escribiendo deseos y haciéndolos realidad.

Estoy haciéndome grande, desperezándome, recordando mi paz.

Por eso quiero que llegues de noche, para que tu espada pueda descansar dentro de mí y mi casa amanezca rodeada de ríos de vida.







viernes, 29 de abril de 2016

Ya no quiero más fresas

Gracias a ti no quiero más fresas.

Me acostumbré a comerlas de tu boca, invadiéndolas con tu color rojo, endulzándolas con tu olor deseo.

No me creas cuando te digo que quiero ser tu amiga, no es cierto.

Ni siquiera quiero ser tu novia, mucho menos la mujer de tu vida.

Quiero ser la que da un puñetazo sobre la mesa donde descansa el maldito puzzle de 500000 piezas que estás a punto de terminar.

Quiero descolocarte, sacudirte de esa larga siesta que llamas vida.

Que te levantes de la mesa, me pongas cara a la pared y me desnudes sólo de cintura para abajo.

Lo sabes y lo haces, porque a pesar de quedarte paralizado a destiempo, mis órdenes siempre son deseos para ti, por eso las cumples sin pereza.

Te oigo respirar de ganas, sólo imaginarte mirándome mientras te muerdes el labio, hace que el néctar de mi centro se deslice despacio, transparente y meloso por el interior de mis muslos.

Tú lo recoges delicado y apretado.

Puedo escuchar como lo llevas a tu boca para deleitarte con su sabor.

Sé de tus labios marrones y del brillo que la mezcla de tu saliva y mi jugo dejan en ellos. Sé de tu lengua roja entre tus dedos cargados de sexo.

No me hace falta mirarte, ni quiero, prefiero lamer la sal de mi cara en la pared donde la apoyo para pensarte.

Me aprietas por haberte desmontado el puzzle, por obligarte a revisar tus prioridades y aburrimientos.

Levantas mis nalgas para introducir tu pene duro, tu pene que babea ganas de quitarte la razón.

Ummm, qué placer más placentero, así, redundante, como debe ser el sexo no separado del amor, redundante.

Entra sin salir todo el rato, profundo, tu pelvis viene y va mientras la mía se levanta respingona para recibirte entero.

Bajas y subes el ritmo adivinando mi pentagrama, con los cinco sentidos, con los cinco magníficos y los cinco puntos cardinales.

Me aprietas desde atrás, me pellizcas los pezones, me besas de lado mirando lo que hay tras mis ojos, más allá de mí.

Muerdo tu labio inferior, como una loba muerde a su lobo cuando lo malcría de amor.

Con tu mano izquierda frotas suavemente mi clítoris, la punta del iceberg, la punta de mil terminaciones nerviosas que aúllan tu nombre. 

La mano del diablo dicen, la mano dirigida por la parte más creativa y juguetona del cerebro.

¡Arrrrrdooooo! ¿Cómo eres capaz de armar las piezas de mi puzzle tan perfectamente desordenado a tu antojo y semejanza?

Ahora entiendo que conoces los códigos, aunque tengas dislexia numérica.

Ahora sé porqué te elegí, porque tu pasividad no es eterna, solo es tú.

Solo es nosotros en nuestra efímera existencia de los cuerpos que sudan lo que no sirve, para llenarse de la más irreverente comprensión.



domingo, 24 de abril de 2016

Me aburre discutir

Se acabó la discusión, no porque me canse, sino porque me aburro cuando intento convencer, dominar al otro con la palabra.

Prefiero utilizarla para crear, para contar historias donde ganamos todos.

Tampoco quiero que me agobien, y menos tú, reflejo de mis demonios.

Por eso me voy de la pelea, quiero conducir hasta quedarme sin gasolina y sin excusas para volver a buscarte.

Hace un calor horrible, pegajoso, húmedo... 

Cuidado con lo que deseas, dicen los que saben. Me quedé sin gasolina, justo en el km 69.

¡Joder Dios!!! No ayudas nada.

Poco queda alrededor, aparte de un cielo inmenso azul, arena y más arena, algún que otro cactus y un sol envolvente, potente que cada vez se parece más a ti.

El universo conspira a tu favor, la que me faltaba.

Se acerca un coche, tu coche, conduce un hombre, mi hombre.

Paras a un lado y te bajas, no me dices nada. Abres el capó para echar un vistazo.

Me meto dentro, no soporto los rayos del sol que cada vez es más tú.

Te das cuenta que es por la gasolina, nada más, te lavas las manos y vienes a la sombra conmigo.

Me miras, suspiras, estás sudando, como yo.

¡Mierda! Me acabo de acordar que con el enfado sólo me puse el traje y me olvidé las bragas. ¿Por qué el universo te lo pone tan fácil???

Te giras hacia mí, acaricias la parte interior de mi muslo izquierdo y muy despacio compruebas con tus dedos que no todo en mi cuerpo está enfadado contigo.

Acercas tu cara a la mía, respirándome, haciendome respirar cada vez más profundo.

Pruebas la reconciliación que sale de la parte de mi cuerpo que es incapaz de reprocharte nada.

Te desabrochas el pantalón, prudente, todavía no sabes si me iré corriendo de nuevo.

Me voy a ir, pero primero le voy a dar la razón a mi sexo, a lo de mí que te añora.

Me subo en ti, en tu deseo que es el mío.

No voy a parar hasta que te des la razón. No voy a consentir que me pidas perdón por protegerte de ti mismo.

Sabes que no te besaré, besarte sería darme la razón y sé que no la tengo.

Te lo voy a hacer lento, porque lo que se hace deprisa cambia despacito.

Aprietas mis nalgas fuerte, llevándome hacia ti con furia, en el fondo no soportas que esté de tu lado.

Esos somos tú y yo, la contradicción más perfectamente invocada para ser transgredida.

Te abrazo fuerte, muy fuerte, si pudiera te  escarcharía como a una cucaracha.

Quiero que seas otro, que quieras lo que yo, que me quieras a mí, no la que proyectaste, por eso sé que no te amo.

Nos agitamos, nos arañamos, nos emborrachamos de los sonidos de la carne, del olor del deseo.

Estallamos en silencio, solo se escapa un pequeño aullido de placer.

En ese momento nos miramos, empapados, redimidos.

Sudamos las diferencias, el resentimiento, lo que no es.

Ahora sí te besé, porque veo lo que sí, aunque eso es lo que hará que tú y yo no seamos un sí.

Ahora que me duele que te vayas y no sufro, es cuando descubro que te quiero.

Ahora que redescubrí tu esencia sin querer cambiarla para que te quedes, es cuando sé que te amo.








jueves, 21 de abril de 2016

No no y sí

Me aburro de mí cuando me contradigo pensando en ti.

Odio tener que enfrentarme conmigo cada vez que me encuentro contigo.

Quiero que te vayas de esta isla, lejos, muy lejos.

Quiero que te vayas a meditar debajo de un árbol al Tíbet, y que te pongas flaco, muy flaco.

Ya sé que soy mala, muy mala, conmigo y contigo.

Odio a la gente educada, esa gente que consiente todo a todos para ser aceptada pasando por encima de sí mismas.

Incluyéndome yo entre ellas.

Esa gente que enferma sus  cuerpos para dar pena y recibir la atención que no se atreven a reclamar.

Yo no quiero enfermar, quiero dejar de ser lo que los demás esperan de mí.

Por eso soy irreverente, deslenguada, agresiva, impaciente, sabionda e intolerante.

Trato mis carencias con quimioterapia emocional, confundiendo a mi bicho malo con el bueno, me enseñaron a ser buena con ellos siendo malos conmigo.

Me enseñaron que tenía que matar algo dentro de mí, aquello que molestaría a los que me quieren sin quererse.

Me enseñaron a respetar a los demás pero no a respetarme a mí, llenándome así de malas interpretaciones de mí misma.

Ahora tengo que aprender a quererme con todo eso y quererlos a ellos. Dejar de estar enfadada con la que me dio de comer escondiendo la mano que luego pediría su recompensa, como hicieron con ella.

Tengo que aceptar mi reflejo en su cara y hacer las paces con ella a través de mí, de mi victimismo proyectado en ella.

Tengo que mirarme en ese espejo y aceptar la belleza compartida, dejar de centrarme en la mala educación compartida.

Quiero comerme al miedo que llamaron amor, digerirlo, hacer trabajar bien a mi hígado y dejar que recuerde como separar la ira del afecto.

Quiero dejar que mi sexo recuerde el orgasmo, el placer, poder elegir su bienestar y desechar la paja mental.

Me quiero no me quiero me quiero no me quiero no me quiero no me quiero no me quiero no me quiero me quiero.

Me quiero querer...

Me quiero dejar en paz, dejar de compadecerme de mí misma, y tú, pobrecito, no se te ocurrió mejor idea que cruzarte conmigo en plena batalla de mí contra mí. Gracias, eres muy valiente.

No quiero que te vayas al Tíbet, no quiero que te pongas flaco, muy flaco.

Lo que quiero es poder mirarme en tus ojos y decirme, "lo estás haciendo bien Lola, ahora no confundes la paja con el Amor"


sábado, 9 de abril de 2016

¿Cíclica yo??? Oriéntate!!!

A veces quiero a un amante, uno sólo, al Uno. Exploto de amor pensando sólo en él.

Luego ya no exploto, estoy en latencia, no quiero a ninguno y al mismo tiempo a todos por aburrimiento.

Hasta que se rompe el folículo y sale el óvulo.

Entonces quiero al Uno que ya no está separado de los demás, los quiero a todos por diversión.

Mis ansias de  expandirme son tantas que hasta me aparecen amores transoceánicos, transcontinentales.

Y me levanto con cuatro mensajes de "buenos días linda", y todo es maravilloso.

Pero de repente ninguno de esos mensajes es del Uno, y lo que antes no me quemaba, ahora me arrrrrrrrde.

Vuelvo a no querer a nadie, y todo es una mierda, y me la comen esas filosofías que rezan "todo está bien, sucederá si ha de ser, deja de buscar y vive, ama lo que es..."

Todas esas chorradas que son ciertas pero absurdas cuando lo único que quieres es que te devore el Uno, y que te mande un mensaje, y que quiera quedar contigo y arrancarte las bragas que te pones sólo cuando estás con él por el único placer que sientes cuando las rueda para penetrarte sin quitártelas...

¡Joder, hostia puta!!! ¡Otra vez el folículo atascado!

Me vuelve a poseer la arpía, la que manipula, la que se desespera, la que mendiga amor de forma soterrada con mensajes ocultos en formas no invasivas.

Son momentos en los que me encantaría meterme en un convento y hacer queques o galletitas de maría para repartir por los asilos, para que los viejitos aumenten su apetito, disminuyan su dolor y sacudan sus alas.

¡Ay Dios mío!!! ¡Que me dejen! No, no, no, escúchame, espérate un momento.

Y ahí están mis amigas, mis flores, tan sabias y pacientes. Descoñadas, devolviéndome la cordura al darme la razón y recordarme mi naturaleza cíclica.

Así llega un nuevo amanecer, más bello que el anterior.

Respiro profundo, sonrío, quiero a todos y a todo, y veo vídeos de Sergi Torres. (Qué lindo es este muchachito por favor y cuanta verdad en sus palabras)

Y llegan los atardeceres en los que estoy tranquila, sosegada pero graciosa, visualizándome con El que Es, el que me pondrá  "monógama perdida".

Hay un truco que me está funcionando, aparte de escuchar a Sergi Torres y danzar desnuda con mis amigas bajo la luna.

Me dejo inundar por todas mis emociones, las que me endulzan y las que me amargan.

He recordado que cuando soy honesta conmigo misma, todo está bien y no hay nada que buscar que ya no tenga yo.





domingo, 3 de abril de 2016

El artesano y la piedra

Vaya mala fama tienen las piedras.

Lo peor de todo es que ellas mismas se creen todo lo que se cuenta por ahí.

Por eso se ponen delante de pies despistados y masoquistas para que tropiecen, se escurren en las manos de los "malos" para ser lanzadas a los "buenos", se meten en las zapatillas de los caminantes para hacerles parar...

Así van por la vida, de fuertes y de incordios.

Entonces cuando caen en manos de picaderos o escultores que las tratan sin piedad, afanosos por terminar el trabajo y aprovecharse de la belleza que escondían y nunca supieron ver, creen que se merecen ese daño, porque han sido "malas", porque son inútiles y feas.

Había una piedra chiquitita que nunca se creyó ese cuento. Ella no pensaba que para ver lo más hermoso de su corazón, debía ser tratada con tanta dureza, así que nunca se dejaba atrapar por aquellos hombres.

Se adivinaban destellos verdes en ella cuando la miraba el sol, era lisa, sin poros. Se había dejado pulir por el mar y el viento que la mimaban por ser tan valiente y natural.

Un día calló en manos de un artesano que trabajaba con piedras preciosas. 

-¿Por qué me habrá elegido si de preciosa tengo poco?

Pero vio una luz muy linda en los ojos de aquel hombre. Era muy dulce y delicado, así que se dejó hacer.

El artesano le susurraba mientras le iba quitando capas innecesarias que velaban su esencia.

Le hablaba del amor, de sus ansias de conocer a una mujer que deseara tanto como él compartir la vida juntos, llenos de pasión, respeto y confianza.

Poco a poco fue creciendo entre ellos un cariño muy especial.

El artesano se acordó del mito de Pigmalión y rogó a los dioses que dieran vida a aquella piedra tan maravillosa de la que se había enamorado.

Los dioses se negaron. Dijeron que estaba loco por haberse enamorado de una piedra. 

"Menuda pedrada", dijeron, y se esfumaron de allí muertos de la risa.

La piedra los oyó, decidió marcharse para que el artesano la olvidara y pudiera enamorarse de una mujer de verdad.

El artesano lloró y lloró, dejó salir todo lo que aquella herida abría. Deseos no cumplidos, frustraciones, rencores, miedos, sentimientos no mostrados...

Entonces decidió que esta vez no se daría por vencido, no iba a quedarse de brazos cruzados como había hecho siempre, dejando que sus sueños se escaparan por su pereza.

Buscó y buscó sin parar a la piedra hasta que la encontró.

La piedra al verlo lo miró con dulzura.

Le contó de su viaje, de lo que había aprendido.

Le contó que todo ese amor que sentían el uno por el otro era en realidad el amor que sentían hacia sí mismos.

Le dijo que la belleza de la que se habían enamorado era el reflejo propio.

Añadió que todo estaba bien, que las cosas suceden siempre para un propósito mayor, para recordar cómo amarnos a nosotros mismos.

El artesano se marchó a casa.

Le dio muchas vueltas a lo que la piedra le había contado. Sintió paz en su corazón.

Durmió toda la noche de un tirón, un sueño reparador como hacía tiempo no tenía.

Al día siguiente fue a su taller una vez más para continuar con su adorado trabajo.

Entonces vió un destello muy intenso que provenía de la calle.

Emocionado corrió hacia esa luz, reconoció a su querida piedra.

Al agacharse para recogerla, su mano chocó con la mano de una mujer que también la reclamaba.

Cuando la miró, sintió su corazón galopar. Aquella mujer tenía los ojos más  hermosos que jamás había visto. De ese color pardo intenso y brillante que tan familiar le resultaba.

Así es como el amor se recordó a sí mismo entre la mujer, el artesano y la piedra.





miércoles, 30 de marzo de 2016

Hi, yuos, Silver!!

Me encanta que alguien me pida que escriba sobre ella o él, sobre todo cuando es alguien a quien admiro y quiero tanto.

Me cuesta escribir sobre algo que no es mío, pero ésta bien podría ser la historia de cualquiera de una de nosotras.

Es la película ordenada de una mujer ordenada. Una princesa que hizo realidad su sueño de encontrar su príncipe azul, tener hijos y formar un hogar feliz con perdices por el jardín.

Pero en las películas poco se habla de la realidad, menos de la maternidad real.

Esa que te golpea, la que te quita capas y capas, la que te arranca la ropa sin permiso, dejándote desnuda ante un cachorrito que te mira lleno del amor que no te dabas, mostrándote todas las pesadillas que pensabas ya no volverían a quitarte el sueño.

Y mientras, tu príncipe mira asustado, paralizado por la fuerza de los golpes y tu llanto, sin saber qué hacer, a él tampoco le dijeron la verdad.

Entonces no entiende nada, no tiene paciencia, ya no ve a la princesa rosa, ahora ve a la mujer, una mujer roja.

Pocos y pocas son los que soportan el color rojo. Ya sabemos lo que pasa con Pablo Iglesias, los indios americanos, las compresas de la tele y su líquido azul.

Y cuando empezaba a recoger los jirones de su disfraz, la vida le vuelve a dar la vuelta cansada de verla vestida con harapos.

Queda desnuda frente a su príncipe que también se ha quitado el traje de color, príncipe y princesa ya no se reconocen.

Y vuelve a llorar, a tener cuatro párpados, a pensar que nadie la volverá a querer, a desear, a ver, porque pocos soportan el impacto del rojo, de su fuerza, de la sangre.

Pero de él nos reinventamos, y "la primavera nos estalla en la cara", "dejamos de arder para ser la llama", porque ya sabemos que "cualquier barranco seco vuelve a correr con la tormenta adecuada"

Así es como de repente aparece un indio americano encima de su caballo que no es blanco, es pinto, y luego otro de espalda ancha y pies preciosos, y luego otro y otro y otro...

Y nos miran, a nosotras, a mujeres encarnadas en una nueva piel, con cicatrices, pero nueva.

Al principio están recelosos, pero algunos incluso se atreven a transgredir la regla, empapándose con nosotras de vida nueva.

Ahora lloramos de emoción, celebrando "regalos envueltos en putadas"

Ahora la vida se presenta tal como es, multicolor, tornasol, transparente, sin velos, sin cristales empañados más que por el vaho de la excitación.

Nota aclaratoria: hay frases que no son mías, plagiadas con el permiso de su autora que en cualquier momento puede reclamarlas.



lunes, 28 de marzo de 2016

Esa delgada línea entre cómeme el coño y ven que te doy la teta

¡Ay mujeres maravillosas y lindas de mi vida, Lola de mi corazón!

¿Por qué somos tan pesadamente protectoras??

¿Por qué confundimos sexo con protección??

Enseguida nos creemos con el derecho de "guiar, enseñar y salvar" a nuestros amantes.

Qué soberbia la nuestra, conocedoras del bien y del mal, guías ilustradas de pobres hombres descarriados, perdidos sin nuestra luz.

¿Por qué no cambiamos el orden de las cosas?

¿Qué tal si nos ocupamos de nosotras, de salvarnos a nosotras? ¿Qué tal si nos empezamos a plantear que no hay nada de qué salvarse, que se trata de todo lo contrario? 

Se trata de arder, de mudar la piel, de respetar ese lugar sagrado del que nace nuestro fuego, nuestro útero, nuestra vagina.

Deberíamos reconciliarnos con ella, decir su nombre en alto, darle su lugar, el lugar del placer, de la vida.

VA-GI-NA, CO-ÑO, U-TE-RO. 

Porqué tanto miedo a nombrarla, ¿por miedo a ser juzgadas, a ser acusadas de irreverentes, descaradas, osadas, salidas, putas? OMG!!!

Vamos a dejarmos en paz con nuestro propio infierno lleno de flores. Hagamos o digamos lo que sea, cada uno necesita ser su propia manguera, su propia paja, su propio hechicero o bruja.

Dejémonos caer,  estamparnos contra el suelo antes que contra la pared, estallemos en mil pedazos de verdad silenciada, lo bello nace del caos, el desorden, trozos tropezando entre sí vivos por la risa de la incoherencia necesaria a veces.

Ya hay psicólogos y  psicópatas suficientes en este mundo como para ser uno más del montón.

Ocupemos nuestro lugar, sin etiquetas, y cuando nos acomodemos en un sitio, volvamos al juego de la sillita, a ser niños que se descolocan a gusto para estirarse  y volver a la adrenalina de no saber dónde estará el próximo cuerpo a habitar, sin preocuparnos por lo que pueda suceder, porque siempre será maravilloso.



domingo, 27 de marzo de 2016

¿Y si la próxima vez empezamos por los pies?

La próxima vez que nos veamos me acostaré frente a tus pies.

Los tocaré y hablaré con ellos, quiero saber qué pisan.

¿No te había dicho nunca que me encantan? ¡Los adoro! 

Seguro que no te dabas cuenta, pensabas que mi atención estaba en otra parte de tu cuerpo, pero te equivocabas.

Me quedaba embelesada observándolos cuando caminabas descalzo, cómo te sostenían, cómo intentaban todo el rato bajarte a tierra, al aquí y ahora.

Y tú no parabas de hablar sin fijarte en ellos, en el mensaje tan bonito que siguen teniendo para ti. En el esfuerzo cariñoso que hacen para que camines con menos peso sobre tu espalda, tan preciosa también.

Incluso llegabas a pellizcártelos, a arrancarles las uñas, y ellos pacientes se callaban, no se atrevían ni a sangrar, porque conocen tu dolor y saben que esa es una de tus maneras de aliviarlo.

Cuando nos recostábamos desnudos frente a frente los miraba de reojo, se frotaban entre ellos tímidos y excitados por lo que sabían que venía después.

Un día incluso te vendé uno ellos, ¿recuerdas? Estaba un poco avergonzado porque pensaba que olía mal. Nada más lejos de la realidad, olía a esfuerzo, a ganas de escalar retos y caminar sueños.

¿Sabías que cuando nos asustamos la primera parte de nuestro cuerpo que reacciona son los pies?

Se engruñen, intentando agarrarse a la vida.

Quiero acariciarlos suavemente y que me cuenten qué es lo que te asusta, quiero que me digan tus miedos, a qué te aferras cuando te invade algún terror.

Quiero saberlo porque por alguna razón que desconozco, te elegí como espejo.

Así, conociendo tus miedos, conoceré los míos.

Te quiero mucho. Acabo de darme cuenta cuánto me amo a través de ti, nos parecemos tanto.

Ya sé que piensas que estoy loca, pero no me importa, si no fuera por esta locura no viviría el regalo de este amor loco, me correspondas o no.

Creo que no es eso lo relevante. 

Lo esencial y más verdadero para mí es el permitirme por una vez hace mucho tiempo, sentir, sin razonar, sólo sentir.

Todo este tiempo sin saber porque llegaste a mi vida y hoy tras haberte mandado un par de mensajes, una charla con dos amigas y una peli, la respuesta llega sóla.

Gracias, porque me traigas un detalle o no, te quedes en mi vida o no, sin importar el nombre que le demos a esa estancia, me has hecho uno de los más grandes regalos posibles, el saber cuánto soy capaz de amar a alguien, capaz de amar a mí, sin importar lo que venga después.














miércoles, 23 de marzo de 2016

¡Ay, qué pereza!!!!

"¡No se puede tener todo mi niña!"

La de veces que me he tenido que morder la lengua para no decirle esta gran mentira a mis hijas.

Claro que se puede tener todo, el secreto es permitírtelo.

Yo lo quiero todo.

Por eso no puedo ser tu media naranja, porque no quiero que te conformes con mi mitad, yo no voy a conformarme con la tuya.

Quiero comerte entero, engullirte, todo de ti. Tus sonrisas, tus lágrimas, tu locura, tu testosterona, tu lado femenino; tu yin y tu yang. Quiero acariciarte el alma. Sin tiempo, sin medidas.

Quiero que me comas entera. Con mis fantasías, mis dramas, mis locuras, mi incoherencia, mi optimismo, mi mala hebra, mis ovarios, mi menstruación y mi ciclo lunar, mi danza, mis palabras...

No quiero que me comas a cachitos, por capítulos, a destiempo.

No quiero tener que interpretar, adivinar, contar las palabras y masticarlas antes para que no te atragantes.

Quiero que te atragantes, quiero que tosas todas tus pajas mentales.

Si no vas a salirme por la boca mejor cállate.

Si no estás preparado para recibir todo lo que quiero darte, no vengas.

No pienses por mí, no tienes que protegerme de nada, menos de ti.

No soy una princesita, no me la comas con excusas baratas y filosofías mediocres de amores mediocres a lo culebrón latinoamericano.

Yo quiero la vida real. Y en la vida real la gente que quiere hace, el amor, la poesía, la fantasía, con alevosía y sin culpa.

La gente real hace alquimia, como tú y como yo. Si no mira de donde venimos y en donde nos reinventamos.

No hay que ir a ningún sitio, el lugar somos nosotros.


lunes, 21 de marzo de 2016

Espejos

Me estoy recordando.

Nada nuevo, sólo me dejo sorprender por mis espejos.

Qué bueno poder mirarme en la mirada de mis amigas y no ver juicio, mirarlas y reconocernos.

Qué lindo mirar a mi diferente y ver tantas similitudes.

Mantener la mirada cuando lo que quiero es mandarte a la mierda. Sólo unos segundos más tarde me veo con tus zapatos y puedo sentir tus "tropiezos", que curiosamente, han sido los míos, si no en esta vida en otras.

Me doy cuenta de que eso no sería posible si no te sosteniera la mirada, si ante tus patujadas, me diera la vuelta y te lanzara un rayo fulminador con los ojos de mi nuca.

Y entonces llego a ese lugar donde todo es nada y nada importa porque todo cuenta junto, imposible entenderlo separado ya que la esencia es Una.

La tríada de lo que es, creador, creación, criatura.

La existencia de uno no tiene sentido sin los otros dos, da igual el orden porque el caos es la esencia. Sin él y su magia no existiría la vida, el mestizaje, la magia de la evolución.

Nadie es puro, sin mezcla, todos somos cachitos de todos, por eso me puedo poner tus sandalias y no me molestan, si lo hicieran no habría entendido el regalo de estar aquí, la fortuna de estar viva y caminar a tu lado.

Aún así se me olvida de vez en cuando mirarte a los ojos, volviendo a formar parte de la desconfianza y el juicio.

Imperfecciones que no me quitan el sueño porque en él todo se vuelve a ordenar, vuelven los espejos.

¡Gracias!



sábado, 19 de marzo de 2016

Hay personas con las que mejor sólo en sueños

¿Por qué somos tan pesados?

¿Por qué si te gusta alguien le das tantas vueltas y no actúas?

Creo que es más sencillo.

Simplemente se trata de honestidad.

Voy a ser sincera. Sólo hay un hombre de los que me han acompañado en algún momento de mi vida que me sigue robando el sueño.

No lo entiendo, porque a pesar de hablar muy bien el idioma de la pasión y el deseo, el de la comprensión es incomprensible. Pareciera que habláramos japonés.

Así que he decidido no seguir enloqueciendo y arrancándome la piel cada vez que lo recuerdo. 

Por eso lo hago de mí siempre que quiero en sueños.

Me lo como, lo devoro, le hago decirme cosas bonitas y él me mira derretido.

Sé que en la realidad es un desquicie.

No soporto leer su manera de hablarme.
Y él no soporta escucharme al escribir.

Por eso he encontrado esta extraña manera de desintoxicarme.

Así lo voy olvidando poco a poco y no me dejo engañar por mis ganas, porque las suplo por mi fantasía totalmente consciente de ello.

Así me dejo en paz y a él también.

A favor de todo le quiero y deseo que sea feliz, ¡Ai shiteru!