"Lo mires por donde lo mires, has visto poco y queda mucho por ver"
Esto me lo dijo mi bruja. Sí, tengo una bruja a la que amo y adoro.
Muchas mujeres acuden a ella preguntándole por el amor.
"¿Cómo podemos seguir tan ciegas, cómo tan sólo 5000 años de patriarcado pueden haber borrado la sabiduría de millones de años vividos con ese amor dentro de nosotras?" Decía.
Ella, paciente, las escucha, pero no les contesta. Les incita a hablar con otras mujeres y hombres.
Ellas saben a quien preguntar según su estado de ánimo.
A veces preguntan a quién le dirá lo que quieren oír...
-Él te ama, sólo que tiene miedo.
-Él te ama, pero no tiene la madurez necesaria para comprometerse.
-Él te ama, pero piensa que es poco para ti.
-Él te ama, pero tiene dudas.
Otras veces preguntan a quién le dirá lo que no quieren oír...
-Olvídalo, no siente "eso" que "debe" sentir para quedarse contigo.
-Olvídalo, se aprovecha de ti.
-Olvídalo, es un chiquillaje.
-Olvídalo, es una gallina para tanto millo.
Y cuando se han hecho 2000 preguntas, y se han contestado 5500 veces, les dice...
-¿ Qué sientes ahora?
-Siento agotamiento y al mismo tiempo mucha paz.
-Bien... ¿Qué sabes ahora que ya sabías y no querías acertar?
-Que dan igual las preguntas, porque importan menos las respuestas.
Lo que realmente importa es el hecho, dan igual las razones de dicha elección.
Y está claro que lo que ha elegido no soy yo.
-Ummm... ¿Y entonces?
-Entonces pienso... "Me da igual todo, la vida son tres días, me lo follo cada vez que quiera, así él seguirá pensando en mí, aunque sólo sea por ese momento de placer"
-¿Y?
- Y luego me digo..." Eso no es amor, ni por ti, ni por él. Es necesidad, es orgullo, es engaño. ¿Cómo quieres amor en tu vida si tus acciones van en su contra?"
Así que decidí elegir yo, hablé con la arpía que me poseía, le dije que la entendía, pero que ya no me convencía su discurso.
-Ya veo... ¿Y tú?
-Yo también. ¡Gracias!!!
-¿Sabes porqué pintó mis uñas de rojo?
-No.
-Hay pinturas muy antiguas en las piedras de todo el planeta. Pinturas prepatriarcales, donde las mujeres se pintaban con sus uñas rojas. Era una forma de mostrar su capacidad de logro, su capacidad de moverse hacia sus objetivos.
Si alguna vez sientes dudas, vete a la naturaleza, pinta tus uñas de rojo e invoca a tus ancestras, toda su sabiduría amorosa está en ti. Deja de buscar fuera lo que está dentro. Porque lo de fuera es sólo un reflejo de lo de dentro.
Esta bruja está en mí, igual que lo está en ti.
No hay comentarios:
Publicar un comentario