Mi niña-mujer lo sabe...

Hay niñas que se ponen preciosas y se visten de blanco para hacer la primera comunión. 

Celebran así el paso de niña-mujer y toman el "cuerpo" de Cristo por primera vez.

Luego hacen una gran fiesta donde lo celebran con sus seres queridos, o no, y reciben miles de regalos útiles, o no.

Salma no se pone, ya se sabe hermosa.

Celebrará su paso de niña-mujer en una cita muy especial.

También se  pondrá un traje blanco porque es inocente, es pura, sin pecado concebida, aunque no haya sido bautizada.

No tomará el cuerpo de alguien que se sacrificó por ella para demostrarle su amor.

No necesita ni quiere que nadie muera por ella, sabe que eso no es Amor, es una deuda para el resto de su vida. 

No necesita que se lo demuestren, porque sabe que el Amor Es, siempre.

Ella tomará helado, o comida japonesa, su preferida. Tomará alimentos que le den placer y que no la condicionen o reclamen algo luego. Alimentos que le recordarán que la vida es para aprender disfrutando.

No pedirá regalos, sabe que ese momento y las sorpresas que tenga, ya lo son por sí mismos.

Esa cita será con el hombre más importante de su vida hasta ahora, su Papá.

Él la tratará como lo que es, una Diosa experimentando por propia elección en su vida terrenal. 

Creo que será un buen referente para cuando vaya a elegir un compañero o compañera de vida.

Ésta me parece una experiencia más útil y verdadera, respetando siempre las otras opciones.

A mí no me enseñaron todo esto y lo entiendo. Me hubiese encantado que mis padres me hubieran hecho el mismo regalo, pero a ellos tampoco le dijeron la verdad.

Ahora mi hija lo sabe, ya lo sabía, solo que en vez de dar con unos padres que se dejaron llevar por el cuento de otros, eligió unos padres que reescriben las historias que consideran injustas con la Vida. 

Padres que la reafirman, para que sea libre y dibuje relatos deseados con confianza en ella misma cada día de su preciosa existencia compartida por placer, por Amor.