Hace unos días, alguien con el que solía hablar mucho sobre amor, me dijo: "Lola, no tienes que hacer nada, cuando aparezca esa persona que tanto deseas, lo sabrás"
Y no deja de venirme a la cabeza mi primer parto. Cuando le decía a mi hermana: "Pino, ¿y si no me entero cuando va a nacer el bebé y lo paro en el baño?"
Mi hermana sin parar de reír me contestó: "Tranquila, cuando tengas las contracciones de verdad, lo sabrás"
Lo Sabrás....
Y sé que lo sabré. Y sé que está por ocurrir, sólo que a veces me puede la impaciencia.
También me dijo que este tiempo era para mí, que debía estar conmigo, sumergirme en mis mareas.
Así lo siento. Me atrevo a manifestar mi enfado con lo yang. Ya no tengo miedo de enseñarle los dientes, de que se atreva a despreciarme en mi propia cara, sin tretas, sin metáforas.
Me lo como, lo mastico y me lo trago, lo devoro, integrándolo en mí, quedándome más que saciada. Por eso ya no necesito mendigar por un mendrugo de amor.
Ya no me asusta que me abandone, que no me mire, porque ahora por primera vez siento que me tengo y me basto. No necesito medias naranjas, ni siquiera naranjas enteras. Quiero un plátano maduro, que no le asuste ser picado y devorado por él mismo, que sea capaz de diluirse y renacer como le plazca.
Ya no me creo la parte de lo masculino que me han enseñado las mujeres de mi árbol...."Los hombres son malos"
Hasta ahora he alimentado esa mentira con mi propia experiencia. Pero veo lo que hay detrás, lo que siempre estuvo oculto... La creación de un mundo paralelo para soportar el rechazo, en definitiva, la falta de Amor por mí.
Me he sumergido en el Gran Azul, se han disuelto las formas. En la superficie sólo quedan las etiquetas que nos hemos dejado poner por pereza.
¿Qué ocurriría si al tomar de nuevo forma lo hiciéramos con la etiqueta de otro? ¿Lo entenderíamos mejor, o le acusaríamos de plagio, perpetuando así rencillas de antaño?
¿Por qué no aprovechamos cada oportunidad que se nos brinda para crecer, para ser empáticos, en definitiva, para Amar?
Cada vez estoy más en paz conmigo, por tanto contigo, por tanto con lo que somos. En esencia, con lo que Es.
Ya no me escondo en mundos inventados, estoy receptiva, estoy en Amor...

No hay comentarios:
Publicar un comentario